Tratamiento para el estrés en Atocha, Madrid

Gestionando emociones y estrés: Claves para el bienestar emocional

Vivimos en un mundo lleno de demandas y desafíos que pueden generar una gran carga emocional y estrés. La gestión emocional eficaz se ha convertido en una habilidad vital para mantener el bienestar mental y físico. Nuestras emociones están presentes en nuestro día a día permitiéndonos tomar decisiones, entender el mundo en el que vivimos y relacionarnos con los demás. 

La gestión emocional implica la habilidad de reconocer, comprender y regular nuestras emociones de manera saludable. Esto es fundamental para lidiar con situaciones estresantes de manera adaptativa y mantener un equilibrio emocional en nuestra vida. El estrés, por otro lado, es una respuesta natural del organismo ante demandas y presiones externas, pero cuando se vuelve abrumador y constante, puede tener un impacto negativo sobre la salud. 

¿Alguna vez te has preguntado para qué sirven las emociones? No hay emociones buenas o malas, todas las emociones son adaptativas, es decir, son útiles para nuestra vida, ya que lo que pretenden es mandar un mensaje que debemos ser capaces de escuchar, puesto que es información que necesitamos para saber desenvolvernos en nuestro contexto. Por ejemplo, para saber hacia qué estímulos quiero acercarme o alejarme, qué cosas son las que quiero limitar o sobre qué situaciones debo dedicar tiempo a pensar para poder modificar.

Tipos de afrontamiento

A la hora de regular nuestras emociones y gestionar situaciones de estrés, podemos diferenciar entre varios tipos de afrontamiento. De forma general, podríamos decir que el afrontamiento más adecuado o saludable va a ser el que tenga en cuenta la solución de problemas (en los casos en los que el problema tenga solución) y de atención a la emoción y al proceso de regulación emocional. Tal y como hemos comentado, todas las emociones son útiles y adaptativas, por lo que el afrontamiento basado en la evitación o represión emocional va a tener un impacto negativo en nuestra salud. Algunos ejemplos de estrategias evitativas son:

  • Distracción: llenar mi tiempo con actividades para no dejar espacio al malestar, y así, tener la falsa sensación de que no está.
  • Negación: restar importancia a lo que siento, ocultarlo.
  • Sustitución de la emoción que me genera malestar por otras emociones que siento como más legítimas. Por ejemplo, sentir tristeza pero expresarla en forma de enfado. 
  • Conductas compulsivas como consumo de drogas, salir de fiesta, compras compulsivas, entregarme al trabajo, relaciones sexuales impulsivas… como forma de tapar la emoción que siento. 

Cuanto mejor sea tu relación con el mensajero, el paquete va a ser más fácil de recoger y las emociones van a ser «más suaves». Y esto es gracias a que el mensajero siempre es bienvenido, no tiene ni que llamar a la puerta. 

La gestión emocional y la reducción del estrés son habilidades esenciales para una vida equilibrada y saludable. Reconocer la importancia de cuidar nuestra salud mental, buscar apoyo y aprender estrategias efectivas de afrontamiento son pasos fundamentales para mantener el bienestar emocional en un mundo lleno de desafíos. Si sientes que el estrés está afectando tu calidad de vida, no dudes en contactarnos; desde Aequa psicología te daremos el apoyo y las herramientas necesarias para enfrentar y superar estas dificultades.

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